En los últimos días se han finalizado las labores de pintura en la Cuesta de la Virgen, uno de los lugares más emblemáticos del Albaicín criptanense y de los más transitados por habitantes y turistas, ya que da acceso al Cerro de la Paz.
Esta actuación se une a otras que ya se han realizado por la mejora de este barrio, como el mural de Valbuena en el depósito del agua de la Sierra de los Molinos. También se suma a otras que integran el Albaicín con el centro de la localidad, como la semipeatonalización de gran parte de la calle de El Caño, desde la Plaza Mayor hasta la calle Mayorazgo y la nueva iluminación artística de la que disfrutará cerro y Ermita de la Paz en los próximos meses.
“Sabemos que sólo la pintura no es suficiente, pero sí que es cierto que es una pequeña intervención que suma por la mejora del barrio del Albaicín y de su aspecto. Actuaciones puntuales como ésta le sacan brillo y rescatamos la imagen tradicional de este barrio, con paredes encaladas de blanco y zócalos en añil, dándole el aspecto que se merece”, comenta el alcalde de Campo de Criptana, Santiago Lázaro.
El alcalde anima también a los vecinos del barrio a sumarse a la iniciativa, encalando las fachadas de sus viviendas. La pintura la facilita el Ayuntamiento.