La I Peralveche Bike Race, la sexta prueba del XII Circuito MTB de la Diputación de Guadalajara, se llevó a cabo ayer en un entorno natural que resaltó tanto por su belleza como por su complejidad técnica. La carrera reunió a 124 ciclistas deseosos de enfrentar un desafío único, con opciones de 60 kilómetros para la ruta larga y 33 kilómetros para la corta. El recorrido atravesó paisajes impresionantes de La Alcarria y el Alto Tajo, opacando incluso a las tierras conquenses.
La salida fue a las 9:30 horas desde la Plaza Mayor de Peralveche, reunión que contó con la presencia del alcalde Víctor García Blanco, el coordinador del circuito Javier Fernández, y el director de la carrera Pedro Castelbón. Antes de partir, se guardó un minuto de silencio en memoria de Mariano García Valiente, un vecino querido.
Con el clásico «Thunderstruck» de AC/DC marcando el inicio, los ciclistas salieron hacia la Ermita de Santa Quiteria, desde donde arrancó oficialmente la competencia. El circuito resultó ser un desafío desde el inicio, con subidas difíciles y descensos técnicos que exigieron al máximo a los participantes. Destacaron rampas del 20% de inclinación y pistas rotas que exigieron gran habilidad.
En la categoría Élite, Youssef Issmaili, de Marruecos, se llevó la victoria con un tiempo de 2 horas, 31 minutos y 35 segundos. Elogió a su cercano competidor, Mateo Alcívar, un joven prometedor que llegó segundo. «Aún es junior, pero tiene potencial», comentó Issmaili, quien dedicó su triunfo a sus sobrinas y alabó la belleza del recorrido.
Juanjo Muñoz ocupó el tercer lugar, mostrando un progreso notable respecto a su carrera anterior. En Máster 30, Rafa Revuelta mantuvo su liderazgo en la general al quedar segundo, aplaudiendo el esfuerzo comunitario y organizativo del evento.
Destacó también la participación femenina, donde Isabel González triunfó en la categoría Élite Féminas, superando varios problemas mecánicos. Hugo Ciordia, de solo 14 años, dominó la ruta corta, demostrando un gran futuro con su tiempo de 1 hora, 26 minutos y 15 segundos.
El evento fue un éxito no solo deportivo, sino cultural, finalizando con una paella popular donde ciclistas y vecinos compartieron un momento festivo. La organización, dirigida por Castelbón y un grupo de voluntarios, fue altamente elogiada por su dedicación, incluyendo la restauración de sendas antiguas.
Los organizadores destacaron la importancia de dialogar sobre el uso de sendas en el Parque Natural del Alto Tajo, defendiendo que la actividad ciclista puede coexistir con la conservación ambiental.
Con la emoción a flor de piel, la Peralveche Bike Race cerró esta primera edición con la esperanza de futuras competencias, reafirmando el compromiso del pueblo con el deporte y la naturaleza.
